En julio, Perú notó una escalada significativa en la producción de cobre, registrando un alza del 17.7% en comparación con el mismo mes del año anterior. Compañías como Marcobre S.A.C. y Sociedad Minera Cerro Verde S.A.A. fueron determinantes en este crecimiento, destacando en un sector que sigue mostrando una fortaleza encomiable. En este escenario, desglosamos los datos y analizamos la influencia regional en esta notable trayectoria ascendente.
El sector minero peruano, que desempeña un papel vital en la economía nacional, ha estado experimentando un resurgimiento notable, como se evidencia en las cifras de producción de cobre de julio de este año. La producción nacional de cobre en julio alcanzó las 229,728 toneladas métricas finas (TMF), lo que representa un incremento considerable del 17.7% en comparación con las 195,234 TMF del mismo mes del año pasado. Este auge ha sido impulsado en gran medida por el excelente rendimiento de empresas prominentes en el sector, como Marcobre S.A.C., que vio un crecimiento explosivo del 65.4%, y la Sociedad Minera Cerro Verde S.A.A., que registró un aumento del 12.5%, manteniendo su producción mensual en un impresionante nivel por encima de las 36,000 TMF a lo largo de este año.
Otros contribuyentes notables a este aumento incluyen a Minera Las Bambas S.A. y Compañía Minera Antapaccay S.A., que también experimentaron un crecimiento interanual, marcando incrementos de 0.4% y 19.8% respectivamente en julio. Anglo American Quellaveco S.A. sigue siendo un jugador vital en este escenario, contribuyendo enormemente al aumento de la producción cuprífera con una suma considerable de 30,669 TMF.
Esta tendencia ascendente no se limita solo a julio. De enero a julio, la producción de cobre alcanzó un acumulado de 1,548,005 TMF, marcando un alza del 19.8% en comparación con las 1,291,890 TMF registradas durante el mismo periodo en 2022. La Sociedad Minera Cerro Verde S.A.A. ha sostenido su posición dominante en este sector, ocupando un considerable 18% del mercado, seguida de cerca por la Compañía Minera Antamina S.A. y la Southern Perú Copper Corporation, que representaron el 15.5% y el 13.1% de la participación total, respectivamente.
La importancia de la producción de cobre en Perú no puede ser subestimada, dado que representa una de las principales actividades económicas del país, contribuyendo significativamente al PIB nacional. El cobre, conocido como el «metal rojo», tiene una amplia gama de aplicaciones industriales, lo que lo convierte en un recurso muy demandado a nivel global.
A nivel regional, Arequipa se ha destacado como el principal contribuyente en este escenario, siendo responsable del 18.2% de la producción total, una hazaña en la que Sociedad Minera Cerro Verde S.A.A. tuvo un papel destacado. Moquegua no se quedó atrás, alcanzando el segundo lugar con una participación del 16.3%, influenciado fuertemente por Anglo American Quellaveco S.A. En tercer lugar, encontramos a Áncash, que contribuyó con el 15.8% de la producción total, una región donde Compañía Minera Antamina S.A. se destacó notablemente. Es impresionante notar que estos tres departamentos combinados sumaron más de la mitad de la producción nacional de cobre, acumulando un total del 50.3% hasta julio de 2023.
El sector minero, particularmente la producción de cobre, continúa mostrándose como un pilar central en la economía peruana, proporcionando empleo, fomentando el desarrollo regional y siendo una fuente significativa de ingresos fiscales. A medida que el sector continúa en su trayectoria ascendente, será esencial mantener un equilibrio, promoviendo prácticas sostenibles y responsables para garantizar un futuro próspero y equitativo para todos los involucrados. Con empresas líderes como Cerro Verde, Antamina, Southern, Las Bambas, y Quellaveco al mando, el futuro parece brillante para la industria cuprífera peruana.
