En medio de tiempos convulsos, José Gonzales, el editor internacional de Rumbo Minero, contrasta la tumultuosa situación política en África con la creciente estabilidad en América Latina, subrayando el potencial económico y geopolítico de esta última en el escenario global.
José Gonzales, editor internacional de Rumbo Minero, pone en evidencia la creciente estabilidad política de América Latina, subrayando el notable contraste con la creciente inestabilidad en África, especialmente considerando los recursos naturales abundantes y la viabilidad futura que Latinoamérica promete. Este análisis viene en un momento crucial, cuando los ojos del mundo están atentamente observando los dramáticos sucesos que se están desplegando en el escenario internacional.
Golpes en África: Un Continente en Crisis
El experto economista señaló que The Economist ha declarado al siglo XXI como «el Latinoamericano», marcando así el reconocimiento del valor inherente y la viabilidad a largo plazo de los recursos naturales que abundan en la región. Esta afirmación toma mayor relevancia frente a los recientes eventos desestabilizadores en África, donde la política se encuentra en un estado constante de fluctuación, marcado por golpes militares y agitaciones civiles.
Durante la semana pasada, el mundo fue testigo de un golpe militar en Gabón, el cual resultó en el derrocamiento y posterior arresto domiciliario del presidente Ali Bongo, marcando el segundo evento de este tipo en África en un corto período de tiempo. Este incidente ocurrió apenas un mes después de que Mohamed Bazoum, presidente de Nigeria, fuera depuesto y tomado como rehén por su propia guardia presidencial.
Gonzales destacó que este último golpe se suma a una serie de incidentes similares que han sacudido la región desde el año 2020, dando lugar a una cadena de gobiernos militares que se han instaurado en África Subsahariana, también conocida como África Centro Occidental.
África Subsahariana: Un Epicentro de Inestabilidad Geopolítica
Según Gonzales, estos eventos políticos tumultuosos parecen ser una versión más extrema de la volatilidad que está caracterizando a la era post-pandémica en todo el mundo, en una época marcada por importantes cambios geopolíticos y geoeconómicos globales, destacando la invasión rusa a Ucrania como uno de los acontecimientos más sobresalientes.
Analizando más profundamente, el analista de Wall Street señaló que, desde el 2021, África ha experimentado una serie de disrupciones políticas, sucediendo tras dos décadas de procesos electorales continuados. De hecho, desde el 2017, de los 18 golpes registrados a nivel mundial, solo uno, Myanmar, ha ocurrido fuera de África.
Gonzales resalta que, según informes de la BBC, un común denominador en estos golpes ha sido el gobierno deficiente, la desaceleración económica, el abuso de poder y el fraude electoral. A esta compleja mezcla se le suma las recurrentes sequías prolongadas que han exacerbado el descontento y la necesidad entre la población, junto con la presencia incitante de la milicia privada Wagner de Rusia en la región.
Recursos Naturales y Resentimiento Anticolonial: Un Cóctel Explosivo
Uno de los puntos críticos en el ámbito de la minería africana es la percepción de un sistema diseñado para explotar los ricos recursos naturales de la región, una situación exacerbada por la presencia de tropas francesas y una moneda única administrada por Francia, lo que ha alimentado un creciente sentimiento anticolonialista. En palabras de Gonzales, este resentimiento africano ve este sistema como un legado de explotación que sigue beneficiando a las potencias coloniales a expensas de la población local.
El especialista también se refirió a la riqueza mineral de los países afectados, mencionando que Gabón es rico en manganeso, diamantes, oro y uranio; Nigeria destaca por sus reservas de uranio, carbón, hierro, estaño, fosfatos, oro y petróleo; Guinea es conocida por su bauxita, hierro, oro y diamantes; Burkina Faso tiene importantes yacimientos de oro, zinc, cobre, manganeso y fosfatos; Chad es rico en oro; mientras que Sudán cuenta con importantes reservas de petróleo, oro, cromo y hierro.
En este contexto, América Latina resalta como una región de creciente estabilidad y potencial, marcando un promisorio contrapunto en el escenario mundial actual. Con su rica dotación de recursos naturales y una política más estable, la región está preparada para desempeñar un papel significativo en el futuro geopolítico y económico global, demostrando una vez más que el siglo XXI puede, de hecho, ser «el Latinoamericano».