Arabia Saudita emprende un ambicioso plan de diversificación económica, centrándose en la minería y la inversión en naciones ricas en recursos minerales. El Editor Internacional de Rumbo Minero, José Gonzales, analiza esta nueva dirección y sus implicaciones en medio de una disputa entre la minera de litio 3 Proton Lithium, la NASA y el Departamento de Administración de Tierras en Estados Unidos.
Arabia Saudita se embarca en un audaz proyecto de modernización económica para reducir su dependencia del petróleo y diversificar su base económica. El país ha fijado la mira en la industria minera como parte de esta estrategia, destinando recursos significativos para aprovechar recursos minerales valuados en impresionantes US$ 1,300 billones, según las palabras de José Gonzales, Editor Internacional de Rumbo Minero.
Esta decisión está en línea con los esfuerzos de Arabia Saudita por diversificar su economía y atraer inversiones en países ricos en minerales. La ascensión del príncipe Mohammed bin Salman al liderazgo efectivo del país ha impulsado una modernización económica, aunque también ha suscitado preocupaciones sobre su manejo político.
Uno de los proyectos en curso, informado por Bloomberg, es la construcción de una mina de zinc y cobre a 200 kilómetros de Riad. Según Gonzales, el depósito de Khnaiguiyah (Naiguiya) tiene el potencial de producir anualmente 100,000 toneladas de zinc y 10,000 toneladas de cobre, lo que podría incluso duplicarse en el futuro.
Bloomberg compara estos volúmenes de producción con la producción total de Chile en tan solo 18 horas. Además, destaca que Arabia Saudita planea refinar y procesar los recursos minerales adquiridos en el extranjero en su propio territorio, lo que podría impulsar aún más su industria.
Gonzales enfatiza que la estrategia a largo plazo de Arabia Saudita es competir con China en la oferta de metales y minerales refinados necesarios para la electromovilidad y la transición energética, lo que reduciría su dependencia del petróleo y mantendría su relevancia económica e industrial en el nuevo panorama energético global.
Aunque el interés principal de Arabia Saudita se centra en el cobre, también está explorando posibilidades en uranio y fosfatos para respaldar su programa de energía nuclear. Sin embargo, se reconoce que los recursos minerales de Arabia Saudita son limitados geológicamente, lo que plantea desafíos adicionales debido a la escasez de agua y la falta de infraestructura en ciertas áreas.
No obstante, Arabia Saudita considera la minería como el «Tercer Pilar» de su visión económica para el año 2030, junto con el petróleo y la petroquímica. Se proyecta que la industria minera podría contribuir con impresionantes US$ 75,000 millones al año al Producto Interno Bruto (PBI) del país.
Aparte de su enfoque en la minería, existe una disputa actual entre 3 Proton Lithium Inc., una empresa minera estadounidense, la NASA y el Departamento de Administración de Tierras en Estados Unidos. La controversia se centra en la remoción de 93 kilómetros cuadrados de la concesión de la compañía por parte de las autoridades.
Según un analista de Wall Street, Railroad Valley en Nevada, donde se encuentra la concesión de 3 Proton Lithium, alberga una de las mayores concentraciones de litio en Estados Unidos y posee uno de los diez depósitos más grandes del mundo. Sin embargo, este depósito se encuentra debajo del lecho de un antiguo lago ya seco, que durante décadas ha servido como un punto de referencia para la calibración de satélites de la NASA.
La superficie plana y prístina del lago ha permitido mediciones precisas desde el espacio, utilizadas en cálculos precisos que pronostican cambios climáticos y desastres naturales, además de ser relevantes para la seguridad nacional.
Esta disputa entre la minería y la ciencia ilustra los desafíos y las tensiones que pueden surgir cuando se busca explotar recursos naturales en áreas de alto valor científico. A medida que Arabia Saudita avanza en su visión de la minería como un pilar clave de su economía, es probable que se enfrenten a desafíos similares en el futuro.